Los llamaron un error. Pero esa noche, cuando la enfermera Vanessa Douglas escuchó cuatro llantos resonar en la sala de maternidad, supo que el destino le pedía que hiciera algo que nadie más se atrevería a hacer.
Eran las 3:57 de la madrugada en el Hospital St. Mary’s de Chicago cuando Vanessa oyó por primera vez el llanto: no uno, sino cuatro […]